viernes, 26 de abril de 2013

De cómo deberle una entrada a alguien y no encontrar el momento: tarta ajedrez.

Le debo una entrada desde hace meses, pero nunca encuentro el momento y además no sabía como escribirla. Ufff, si es que ni para el título de la entrada estoy inspirada... Pero la semana pasada me encargó una tarta, con indicaciones muy precisas, y ya no podía dejarlo pasar más :-) Una tarta que acabó teniendo el bizcocho de ajedrez, y a mi el ajedrez me recuerda a Alicia a través del espejo, y Alicia (que me encantaaaaa) me recuerda a Jorge: por el gato y por las reflexiones O_O cosas raras que me dan.

Jorge era el amigo del amigo de la amiga de mi hermana Verónica, que luego fue el amigo de mi hermana, y que con el tiempo fue amigo, aunque en más de una ocasión he tenido ganas de darle collejas hasta en el carnet de identidad :-D Claro, que eso nos pasa con todos nuestros amigos, no? Pues eso, empezó lejos y acabó quedándose.

La semana pasada me pidió una tarta... no es que fuera una tarta dificil, al revés, pero tenia las cosas tan claras que me daba un poco de miedo no estar a la altura. Hasta me mandó un dibujo de la tarta!!! jajajajaja.

Hace unos mese tuve que ir a Madrid y Jorge (que entonces vivía allí) se pasó tooooda la tarde del sábado haciendo de chofer llevándome de una tienda de repostería a otra :-) pobret, creo que se hizo más kilometros ese día que en un mes!! Y para el finde pasado confió en mi para esta tarta. Le preocupaba bastante la decoración, pero eso era lo más sencillo: cubrir con fondat, pintar la mitad de negro (quería un contraste fuerte, y pintar es la mejor manera de conseguirlo) y poner unas letras ¡pan comido, Jorge!

Lo complicado estaba dentro. Se me ocurrió que ya que el blanco y negro en contraste era importante para la temática de la tarta, que el bizcocho podía ser de tablero de ajedrez... Claro, que era más bien negro y amarillito, pero me dio el visto bueno...

Hacer una tarta ajedrez no es complicado, lo malo era que era la primera vez que la hacía y además no era para mi. Para no variar no tengo fotos del paso a paso, pero os dejo un enlace a un sitio donde sí lo explican. Básicamente es hacer dos masas, una normal y otra de chocolate, y hornear tantos bizcochos como capas queramos para el pastel, haciendo con las masas círculos concéntricos pero alternando el color de una capa a otra... Si, Malen, muy bien, como siempre eres un libro abierto (nótese el tufillo irónico de mis palabras) En fin, al enlace me remito :-)

- Tortas name (clic) Aquí os explican el modo que yo utilicé.
- I am a baker (clic) otra manera de hacerlo que SIN DUDA utilizaré la próxima vez :-)

El segundo enlace hornea dos tartas, y luego las corta en círculos usando una plantilla. Ésta técnica elimina el problema de que los círculos queden de diferente tamaño y hace que el tablero sea más perfecto.

Yo seguí el primer enlace, y como no tenía tres moldes iguales, me tocó hornear tres veces con el mismo, lavando y engrasando cada vez :-)

Los bizcochos eran de nata para el "blanco" y de nata y nocilla (como el de nata, pero con dos cucharadas de nocilla y una de chocolate en polvo Valor, que le da más color negro) para el negro, con almíbar de canela y relleno de más nocilla. La cobertura para pegar en fondat también era nocilla... Aleeeeeeeee, viva el chocolate!!!

El resto, como ya he dicho antes, fue facil.

Se que la tarta gustó, así que yo más feliz que una perdiz. Muuuuuacs!!!

 

NOTA: ayer mismo me pidió unas galletitas para el día de la madre... Y me mandó dibujo también :-D un chico con las cosas muy claras. Muuuuuuuacs!!!!